Dios todopoderoso puede hacer y deshacer según su voluntad. Sin embargo, es tan generoso y ama tanto a los hombres que nos pide permiso para actuar en nuestras vidas. Así les sucede a los ciegos que aguardan la venida del Señor, proclaman su realeza -Hijo de David- y reconocen que es el Mesías.
Palabra de Dios: «Que os suceda conforme a vuestra fe»
